Este mundo lleno de vida, envuelto en hojas verdes fue brotando. Con el pasar de los años, nuevas formas de vida aparecieron. Atentas y respetuosas a sus dioses le rezaron. Salud, paz, alegría y abundancia imploraron, tal vez el apetito humano llega demasiado lejos, pues solo unos pocos hoy día dan pelea por lo que es puro. Esa ambición que parecía fantástica, enorme y colosal, construyo edificios, calles y más. El sistema babilón se fundo sobre guerras que delimitaron: limites geográficos, colores en la piel y cuanto mas que nos separa de aquél puro ser humano. Tantas lagrimas derramadas y pensar q fue en vano. ¿Acaso es tan bello lo creado? La paradoja hoy se presenta, en la forma majestuosa que dio vida a este planeta “La madre naturaleza”. Grandes olas cubren ciudades, temblores terrenales sacuden las calles, vientos imparables se llevan vidas y lluvias enfurecidas destruyen cultivos. Pareciera querer decir algo, si uno pone atención tal vez se escuche ese grito, el motivo de este escrito, que dice ya no permitir estos “avances” (venenos), que derriten nuestra tierra y nuestro cielo. De esa ambición uno aprende lo poderosa q es la raza, tan solo aires de conciencia repartidos por las tierras, hacen falta para sembrar nuevas vidas…
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1 comentario:
aqui estas, tomando conciencia...
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